Hablando de Basura y Desagües

Otro de los grandes males de la ciudad de México, e imagino de otras ciudades es la basura. El ser humano en general ha desarrollado una tolerancia, o más bien una inconciencia total a este tema cuando se encuentra en la calle, bueno al menos quiero pensar que solo es cuando está en la calle, si no, no puedo imaginar cómo estarían sus hogares. Esta tolerancia, he detectado inicia desde niños.

Esta inconciencia trata de cuando una persona así sin más, en la calle, tira un papel al piso, tal cual como si nada, algunos lo hacen con todo conocimiento y algunos otros, de verdad, lo hacen de manera mecánica. Los niños pequeños lo hacen y nadie les hace ver el error en el que están incurriendo, en las calles podemos ver cualquier cantidad de vehículos que con las ventanillas abiertas, se asoma una mano y sin más arroja todo tipo de basura. Lo peor es que esta práctica llega a todos los lugares donde el ser humano ha llegado, en lugares de retiro, donde se supone estamos en contacto con la naturaleza, por ejemplo la Marquesa, encontramos todo tipo de basura, ah pero eso sí, procurando esconderla de la vista.

Otro caso y el más común, el más tolerado, pero no menos contaminante es el de los fumadores, ¡atención fumadores! ¡El suelo no es un cenicero! Si bien las colillas óptimamente son de un material de fácil degradación, súmenle todos los que arrojan sus colillas a diario en las calles de México, y no solo eso, las arrojan aun prendidas.

Abran los ojos edúquense, la basura no es un mal solo de México, pero por un lugar se inicia, háganlo primero en sus hogares, luego en sus colonias, y siempre estén alertas de sus acciones, si generan basura guárdenla hasta que estén en posición de colocarla donde es debido. De aquí parte otro tema, el de reciclado, eso lo tocaremos en otra ocasión, por lo pronto ayúdennos y ayúdense a concientizar donde dejan la basura.

La anécdota, me encontraba en la universidad, caminando en la acera frente a la biblioteca, cuando, justo delante de mí, una chica acompañada de algunas amigas, disimuladamente dejo caer de forma deliberada un tríptico publicitario, de esos que abundan en esta ciudad. Al ver eso, literalmente recogí dicho papel, detuve a la chica y le dije que se le había caído y que tuviera más cuidado, no lo fuera a perder. Ignoro si esa acción causo el efecto deseado en ese momento, pero no hemos de dejar de señalar a la gente que lo hace y enseñemos el porqué. La basura que no es recogida, en la calle, de una u otra forma van a las alcantarillas, al desagüe, este se tapa causando infinidad de inundaciones, como las que tuvimos la semana pasada en muchos de los lugares de esta ciudad. Pero la afectación no termina ahí, el desagüe termina yendo a rios y mares, haciendo de este problema una situación de alerta internacional.